2.9.14

V.


-Where do stars go? Mama...?

Madre? Dentro nosotros siempre existe ese objeto de afecto, que exige su amor. El que le corresponde, y del que siempre sale victorioso. Inexplicablemente, a veces. Porter se pregunta que si ese niño fuera su adulto serían muy buenos amigos. Irían al club de sonidos a escuchar melodías, tomarían un cleaner y beberían mucho alcohol.

-Ese indefinido no estuvo nada mal - le apunta a su cloudblog - think about it...it would be such a great title :0 - Toma un fix, y se interna en una cabina. Explora con la mano la negrura de la silla. Brinca hacia ella, percibe el olor de un sudor reciente. Se coloca el elctromind, se lo ajusta y se relaja en el respaldo.

-Relax, it's a work in progress. Life is a work in progress- 

Percibe una imagen, la psychotamina turns on y aparece un hombre, joven, con los ojos que parecen  esferas blancas, con un agujero en el medio. Con esa mirada en la obscuridad de sus ojos, que lee esa profundidad de la superficie, donde no hay nada. Sobre ese cuerpo subterfugio del deseo encaminado a lo genital. Ese placer erudito de sí mismo que es el sexo. 

Porter se refiere al sexo, más como una interacción casual, que como un contacto íntimo; y no era un pensamiento singular. Este es el tiempo del goce a través de la conexión. De la conectividad de nuestro interior con lo plural y anónimo. Es el tiempo del extravío de de la singularidad en los bienes communes; la confesión y la entrega de quién se es, en un intercambio por la prohibición explícita.


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